jueves, 22 de noviembre de 2012

10ª CATA CLUB "LA HUEVERA"

Y llegó la décima, nos costó bastante menos tiempo que al Madrid, aunque también con algún buitre en nuestras filas. La fecha elegida fue el 15 de Noviembre, San Alberto Magno, al que le gustaba tomarse una copita de brandy jugando la partida de dominó que echaba antes de la evangelización vespertina. 
Entre las efemérides a señalar tenemos el 104 aniversario del legado del rey Leopoldo II del Congo a Bélgica lo que les hizo una gracia bárbara a los belgas por lo que les cayó de IBI. 
Interesante la cata por las variedades elegidas y por las diferentes opiniones que cayeron sobre los vinos. En blancos nos decidimos por cavas y champagne y en tintos por la monastrell. 

Bebimos un Juve y Camps Blanc de Noirs 2009 que pasó bastante desapercibido, la verdad es que nos esperábamos más de él. Elaborado con pinot noir, burbuja fina, tímido en nariz y flojito en boca. Otra cosa fue el Barnaut Blanc de Noirs, champagne de la misma uva que gustó y fue ganando con el tiempo aunque quien se llevó los mayores elogios fue el Juve y Camps Milesime 2007, cava  elaborado con chardonnay exclusivamente y que mostró una nariz compleja con frutas blancas y tonos lácteos. Paso por boca agradable y final muy largo, más largo que un fin de semana sin vinocross, así que imaginaros. El cuarto de esta serie fue el Louis Roederer Brut Premier también un gran vino con una nariz realmente compleja. Este último llevaba el coupage característico de los champagne a base de chardonnaypinot noir y pinot meunier. 
Y qué mejor acompañamiento para estos vinos que la ensa-LADRILLA locomotiv de garnachastontas. Esa sí que era muy larga en boca, lo que costaba tragar la jodida de ella... 
En los tintos fue donde surgieron las mayores discrepancias, a algunos no gustaron nada y a otros mucho, pero nadie dejó una gota en las copas, ante todo profesionalidad. El Gran Clos Montblanc Unic 2008 de Conça de Barbera fue con el primero que lidiamos, pasó sin pena ni gloria. Sorpresa nos llevamos con el Chateau Romassan 2004  dela A.O.C. Bandol que empezó muy fino y redondo, pero que fue cayendo en picado con el tiempo, una pena. Con los dos últimos surgieron diferentes opiniones. Mientras para algunos fueron unos vinos sin más interés que ver cómo desaparecían de la copa igual que el resto, para otros resultaron muy interesantes. Eran el Juan Gil 18 meses 2010 y el Tarima Hill 2009, de Jumilla y Alicante respectivamente. Lo que no se les puede negar es que mostraron claramente su carácter varietal: fruta roja madura, fruta negra, torrefactos, café, ahumados, etc y un tanino dulce(ver tanino en la vinopedia) con un paso por boca redondo y goloso. Pero bueno, para gustos los tintorros y para acompañarlos el Granito's chicken en salsa que, como siempre estaba de muerte y como últimamente nos lo zampamos sin pan. 
Para rematar tan polémica cata disfrutamos de un Pajarete 1908, PX de Málaga con sus aromas a pasas y frutos secos que gustó en general y se entendió con queso de Roncal y Panettone a discreción.
Recordamos que la siguiente cata será el 13 de diciembre, tomaremos vinos que gustarán a todos (todos los que vayan) y el coloquio posterior versará sobre el ayer, hoy y mañana de la gilda en este mundo globalizado (ver gilda en la vinopedia).

viernes, 2 de noviembre de 2012

9ª CATA CLUB "LA HUEVERA"

Noche gloriosa la vivida en esta novena cata celebrada el 23 de octubre, justo cuando se cumplían 6016 años desde la creación del Universo según los cálculos del reverendo James Ussher (arzobispo de Armagh) y de John Lightfoot(vicerrector de la Universidad de Cambridge). Es lo que pasa por desayunar chinchón con sobaos...
Lamentamos profundamente la ausencia de nuestro compañero Elmo Reno más que nada por la escasez de pan con el que acompañar el condumio. Por lo demás como si se la pica un pollo.
Le metimos un buen repaso a las Rías Baixas y sus albariños. El Maior de Mendoza sobre lías 2011, bodega que debe su nombre al primogénito del clan de los Mendoza del Valle del Salnés, vino elegante, fresco y sabroso. Gustó mucho el Pazo Baion 2010, con crianza también sobre lías (ya tendríais que saber lo que significa lías, pero podéis consultarlo en la Vinopedia). Se mostró complejo, muy largo, mineral y con la botella te puedes hacer una lámpara para la mesa de la salita, se aprovecha todo. El tercer albariño nos llegaba desde Cambados, el Albariño de Fefiñanes 2011, el más fresco de todos, flores, fruta blanca, acidez,… El cuarto blanco fue totalmente distinto a éstos, el Abel Mendoza Malvasía 2011, con fermentación en barrica. Este riojano no gustó al personal por el predominio de la madera sobre todo lo demás que se fue acentuando con el paso del tiempo.

Dimos buena cuenta de la ensaladilla locomotiv que llegó in extremis cuando algún vinocrossista había empezado ya a comerse el mantel de papel.
Para los tintos nos decantamos por enfrentar dos vinos clásicos de Rioja y Ribera con otros dos de iguales denominaciones y corte más moderno. ¿El resultado? Nos pimplamos las cuatro botellas, qué pregunta. Con todo un Prado Enea Gran Reserva 2004 de Muga nos llevamos la primera en los dientes. Un vino con muchos aromas terciarios y acidez, algo que no podía fallar, pero que no mostró nada más, demasiado evolucionado para todos excepto para Garnachastontas que le hizo la ola. El otro "clásico" fue el Pesquera Reserva 2008, un Ribera que nos despistó y se mostró estructurado, frutal y complejo, un muy buen vino. También gustaron mucho el Sierra Cantabria Cuvee 2008, redondo, amable y largo y el Dehesa de los Canónigos 2008, otro tintorro del que merece la pena tener una pequeña partida en casa de 6.000 botellas por si llega el invierno nuclear.

Y aquí otorgamos nuestro primer HUEVO DE ORO, en este caso al conejo en salsa que nos preparó Granito, que estaba bueno, pero lo que se dice bueno de verdad.
Para rematar la noche nos esperaba el Itsamendi Urezti 2008, vino dulce de vendimia tardía de la bodega Itsasmendi. Inspirándose en los grandes vinos de Sauternes, Balsac y Jurançon empezaron a elaborarlo hace ya unos años dejando sobremadurar la uva en la propia viña consiguiendo más concentración de azúcares (corre el rumor de que en realidad cogieron tal cogorza en fiestas de Gernika que se les olvidó vendimiar esa parcela y se encontraron a últimos de noviembre sin saber qué hacer con esa uvas)
Gran vino, como todos los que hace esta bodega lleno de aromas a miel y cítricos con un paso por boca untuoso, ácido y dulce, pero sin cansar y que además se acompañó de maravilla al cake con mermelada de calabaza y el queso que nos sirvió de postre.
Pues otro HUEVO DE ORO que le endiñamos a este vino y aprovechamos para invitar formalmente a Garikoitz Ríos (que sabemos que es fiel admirador de este blog) a venir a una cata al txoko para conocer la mundialmente famosa ensaladilla locomotiv y nosotros el Artizar y el Eklipse de los que nos han llegado excelentes críticas (y si trae el resto de sus vinos tampoco vamos a protestar)
Próxima cata el 15 de noviembre que dedicaremos a los champán (véase champán en la vinopedia) y la monastrell y discutiremos sobre cuántas botellas de clarete le hicieron beber a Felix Baumgartner para convencerle de que se tirara desde la estratosfera disfrazado de muñeco Michelin.